Praga es una ciudad extraordinaria. ideal para los amantes de la historia, la arquitectura, la música y la literatura, donde pueden ver divinos palacios, puentes y plazas milenarias. La que fuera una ciudad "olvidada" durante sus años de comunismo, ahora es la más vibrante de Europa del Este y los viajeros llenas sus plazas, puentes, paseos, hoteles, monumentos y restaurantes.
Es un lugar favorito para muchos viajeros porque guarda una gran parte del encanto de la Edad Media.
En Praga debes caminar "mirando hacia arriba", pues su arquitectura es maravillosa, con edificios espectaculares que van desde el estilo gótico y el barroco hasta el art nouveau y er art déco. Ahora también puedes admirar lo modernos, como "la casa que baila", del arquitecto -
Frank O. Gehry, inspirada en Fred Astaire y Ginger Rogers. La mejor época para visitarla es de abril a junio o en septiembre y octubre. Si no tienes miedo al frío y a la nieve en Navidad tiene un precioso mercado en la Plaza Vieja y conciertos en las iglesias. En julio y agosto se llena demasiado de turistas.
Recomienda a tus clientes un recorrido de 3 a 4 días (después pueden seguir a Viena o Budapest) y zapatos apropiados para los adoquines medievales.